La temperatura del ambiente de sueño es un aspecto que no muchas veces se tiene en cuenta, pero es de suma importancia para que tu y tu bebé tengan un buen descanso y no hayan despertares por frío o calor excesivo. Entonces, ¿existe la temperatura ideal para dormir? la respuesta es ¡si!, hay estudios sobre rangos de temperatura según edad que mejoran la calidad del sueño, sigue leyendo para que sepas cuales son.

Empecemos por los más pequeños, los pediatras recomiendan que la habitación se mantenga en18°C aproximadamente. A veces creemos que lo mejor es mantener la habitación calentita para el bebé y además de eso los abrigamos para asegurarnos que no pasen frío, sobre todo si sentimos sus manos o pies fríos, cuando la verdad es que esto es normal y se debe a la inmadurez de sus sistema circulatorio. Teniendo esto en cuenta, hay que tener mucho cuidado con sobre abrigarlos ya que el calentamiento excesivo puede incrementar el riesgo de muerte súbita. Lo mejor es mantener la temperatura de la habitación en el rango recomendado y complementar con saquitos de dormir.

Dormir en una habitación fría permite tener un sueño de calidad , el conocido neurólogo Chirstopher Winter, indica que dormir con una baja temperatura permite tener una temperatura corporal más acorde y tener una mayor calidad de sueño, pero la temperatura varía según la edad y debemos tener en cuenta el calor corporal si se comparte la habitación entre varias personas.

Regula la temperatura antes de acostarte

Debes saber que durante el sueño REM el hipótálamo deja de regular nuestra temperatura corporal, por eso es importante regular la temperatura antes de acostarte. Si sobrepasas los margenes de temperatura puede verse afectada tu salud, afectando las hormonas de crecimiento, sistema inmunitario, respiración y sistema circulatorio. Ten en cuenta que en el caso de los adultos, la temperatura ideal para dormir es de 15°C y lo recomendable para adultos mayores es que la temperatura ambiental no supere los 19°C.

Además de la temperatura del ambiente, también debemos tener en cuenta el nivel de humedad de la habitación. Si bien no es bueno que haya mucha humedad, el ambiente tampoco debe mantenerse seco. Se recomienda que se encuentre entre el 40% y el 60%. Estos valores no sólo aplican para el cuarto de los bebés sino que también para los adultos.

Si crees que el factor ambiental está afectando tu calidad de sueño o la de tu bebé, te recomiendo el termómetro ambiental de Cuenta Ovejas que mide tanto la temperatura del ambiente, como el porcentaje de humedad. Además, tiene un indicador de confort que te servirá de guia para saber si el espacio de sueño es confortable.